jueves, 18 de agosto de 2011

Dejad al mundo vivir.

Es un hecho más que constatable que lo que más nos gusta en este país es joder a los demás. Imaginemos por un momento que recibimos la visita del presidente de… no sé, Portugal, por ejemplo. Imaginemos también que ese señor tuviera millones de “fans” en todo el mundo, y concretamente en España unos 15 millones.

Sigamos imaginando: ese señor decide un buen día ir a echar una visita a sus seguidores españoles a contarles sus cosas, y a decirles lo que a su juicio deberían hacer y cómo debería ser el mundo. El estado prevé millones de asistentes a dicha cita, pero no dedica ni un duro a organizarla. No tiene por qué involucrarse en ello, es una organización independiente. Estupendo.

No obstante no hace falta mucha imaginación para darse cuenta del pifostio que se montaría, ante la tacaña e indolente pasividad del estado, que pese a justificable, resulta algo irresponsable.

Ahora rebobinemos un poco. Imaginemos que sí se involucra en el asunto. Que piensa que un tercio de sus habitantes, que pagan sus impuestos como los demás, sentirían orgullo por dicha visita; y que darles un gusto a unos habitantes con dinero público, a la par que espolear empresas de transportes, comercio y hostelería de la zona no puede ser tan malo. A fin de cuentas esto es una democracia y (por desgracia a mi juicio) mandan las mayorías.

El resultado de esto último, por lo visto, es que habrán 20.000 individuos que, como a ellos no les gusta una mierda el presidente de Portugal (o gurú espiritual de lo que sea) no quieren que se gaste un duro de sus ridículos impuestos en traer a ese señor tan influyente a nivel mundial. Del mismo modo que también podrían decir: como yo no viajo en avión no quiero que se gaste un duro de dinero público en construir aeropuertos.

Así que se dedicarán a manifestarse cínicamente por las calles para que a los demás no les den ese gusto.

Que a ver, que yo soy el primero que no traería a ese señor, pero entiendo que a la gente le mole, y que por ello, los políticos a los que han votado se lo traigan. Qué le vamos a hacer, el mundo en que vivimos es asín. Hasta que la sociedad no cambie su manera de pensar ese señor mayor seguirá teniendo cierta autoridad e influencia. De modo que el problema no radica en lo que decida el estado, sino en la propia gente, que es la que pone a esos señores ahí. Y que es Imbécil de remate.

Es decir, hay gente que piensa que hace dos mil años existió un judío que tenía superpoderes y que si le obedeces, cuando mueras irás a un sitio que te corres de gusto. O no te corres, porque es pecado, pero lo flipas igual. En síntesis es básicamente eso, y como disparate no tiene nada que envidiar a aquella frase de Homer en un episodio: “…se trata de un robot asesino que es profesor de autoescuela y viaja a través del tiempo”. Pero es que la gente se lo traga.

Por suerte parece que conforme avanzan los tiempos somos más los ateos en esta sociedad. Estupendo también. Pero no a todos nos molesta que los católicos tengan su día de gozarlo, que también pagan sus impuestos, como digo arriba. E imagino que más de lo que cuesta traer a su Líder un puto día. Por tanto invito a no participar en esa estupidez circense, pero dejando hacer al que así lo desea. No es difícil.

En fin, termino con una reflexión que esclafé por Facebook: No hay que cambiar ciertas cosas para que la sociedad madure, sino madurar para que desaparezcan.

Besitos!!

PD: Harina de otro costal es la criminalización y la violencia del estado ante todo lo que cuestione lo oficial, la sobredimensionada repercusión en los medios frente a la nula de otras manifestaciones de idéntica concurrencia ciudadana, etc. Que no es lo que debato aquí. Lo digo para que no meéis fuera del tiesto si opináis.

16 comentarios:

Yhandros dijo...

A mí me parece muy bien que la gente se queje de lo que no le gusta. Como tú te quejas de las quejas de otros. Como se suele decir: "el no ya lo tienen".
El presidente de Portugal no es el representante en la tierra de ningún dios, ni cabeza dirigente de una religión, es simplemente un jefe de estado y si viniera, se cargaría al presupuesto de relaciones diplomáticas (por ejemplo). El paralelismo tiene truco. El tema es que su san su santidad no viene en calidad de jefe de estado, sino del máximo representante del Cristianismo, una religión. Un estado Laico (como podría ser el nuestro), debería de mantenerse totalmente al margen, no promoviendo ni financiando (ni poniendo trabas, claro, tampoco) este tipo de actividades, sino dejarlas a merced de sus propios recursos (será que tiene pocos). Puesto que en realidad es una campaña de márquetin brutal, con el objetivo de captar clientes como haría una compañía de teléfonos, creo que lo justo es que lo costease la propia compañía, y no el estado.

Y no me estoy refiriendo a las obvias y necesarias medidas de seguridad que conlleva un evento de esta magnitud, no hay que ser estúpidos, sino a una serie de gastos (subvención en transportes, cierre de calles, confesionarios de diseño en el Retiro, etc etc), de los cuales debería de hacerse cargo la entidad que tiene interés en el evento.

Raúl dijo...

Si está claro que el problema reside en que un estado laico no debería patrocinar estos eventos religiosos. Pero igual que la Semana Santa. A mí personalmente no me molesta mucho ni una cosa ni otra (sí que se gastan mi dinero en esas cosas, pero también gastan dinero de otros en cosas que me gustan a mí o me vienen bien), pero me parece una incoherencia, la verdad. Es como si yo me declaro ateo pero voy todos los domingos a misa... puedo hacerlo, pero alguien me llamaría, con buen criterio, tontopijo. Y si encima me costeo el bus hacia la misa con vuestras perras, pues tontopijo y un poco cabrón quizás.

Así pues, veo lícita la manifestación anti-Papa, aunque sinceramente no hace sino quitarle fuste al movimiento éste del 15M que desde el principio me gustó pero que ahora me cuesta tomarles en serio. Y lícita no significa necesaria, porque no lo es en absoluto, según veo yo. El Papa no es el enemigo mientras estén los bancos y los políticos riéndose de nosotros. Y los policías dando hostias, no siempre del todo justificado.

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo con Yhan y con Raúl; no se trata de que no organicen visitas o lo que les salga de los huevos, pero que se lo paguen ellos. Y como parece que realmente se creen eso de que son los receptores de la línea directa con Dios, que se paren un pelín a replantearse lo que dicen antes de abrir el buzón, porque o mucho me equivoco, o Jesusito se hubiera liado a repartir hostias a los oportunistas que hacen negocio con esto del merchandising papal (véase el capítulo de los mercaderes en el templo) o del abuso a la mujer...

Yo de momento he comprado entrada a las puertas del cielo para sentarme a ver cómo Dios se ríe de la panda de hijosputa que con el pretexto de la religión hacen de su capa un sayo y venden y compran bulas o predican el machismo más aberrante.

No creo en Dios, pero aquellos que sí lo hacen deberían plantearse si es que creen en un Dios subnormal que no se da cuenta de nada o es que son tan sumamente cínicos que predican algo en lo que no creen en absoluto.

Mientars tanto, y tal como dice Yhan; seguiré protestando igual que tú protestas de las protestas de los demás.

Un beso

Tomás dijo...

No lo enfocáis bien. En primer lugar yo no protesto de nada. Doy mi opinión en mi blog.

En segundo lugar. Da igual en calidad de qué venga este señor mayor. Lo del presidente de Portugal es una situación hipotética, sólo tienes que imaginar que también tiene seguidores y representa a la organización religiosa: "seguidores del presidente de Portugal". Ale, ya la tienes.

EL Papa es lo que es y no hay nada de malo en que venga con dinero público, igual que el alcalde de tu pueblo puede traer un día a tocar a los Barricada en las fiestas con dinero público también. Y nadie se manifiestará para que no vengan, aunque pueda haber gente que no le guste lo que digan (por considerarlos marxistas peligrosos). Es muy lícito que todos disfrutemos de lo que nos gusta con el dinero de nuestras contribuciones. Que además no es tanto: ¿25 millones de euros? Hemos tocado a 50 centimos por español. He pagado más impuestos sólo en la cajetilla de tabaco que he comprado hoy.

Raúl apunta que es incoherente en un estado aconfesional. Como digo antes, si en vez de el Papa a dar misa es un grupo de rock cuyo ideario es implantar una dictadura marxista, vendría igual y diría sus cosas a sus seguidores igual aunque el estado que lo paga no contemple esa posibilidad en su constitución. Es que son cosas distintas.

Que digan hablar en nombre de Dios o de Gracita Morales es indiferente. Como lo es también si es un disparate o no lo que dicen. Eso es asunto de los cristianitos. Me da lo mismo lo que pudiera pensar el judío muerto al que representan.

Tal vez nos indigna tanto esa hipocresia eclesiástica porque aún la vemos (a la Iglesia) como parte de nuestra vida, nuestra sociedad y nuestra cultura. Cuando empecemos a verla como una organización como cualquier otra, que no tiene nada que ver con nosotros sino con los "socios" de su club, dejará de venir el Papa (o al menos no lo tendría tan fácil para que el estado soltase panoja para que venga).

Pero tanto revuelo sólo es una prueba de su relevancia, y que en cierta manera justifica la importancia que se le da desde los estamentos públicos. Nos afecta lo que digan, hasta el punto de ofendernos incluso, y por ello se intenta que no se les dé ni un duro de subvención, aunque otras organizaciones o eventos públicos equiparables que gustan a otros sí la reciban.

Cambiemos nuestro modo de pensar. Quizás descontextualizando el tema, analizándolo como algo aislado, sin perspectiva diacrónica... No sé... yo lo veo asín.

Besitos!

Raúl dijo...

Claro que son cosas distintas el grupo marxista que viene a decir su discurso y el Papa. Da igual el discurso que prediquen, a mí no me molesta ni el marxismo ni el cristianismo, ni estoy a favor de a quien le moleste, como discurso, lo uno y lo otro, sino que si en la Constitución decimos que somos aconfesionales, no entiendo el apoyo público al Papa, o la Semana Santa. Tu alcalde se gastará la pasta en Barricada porque son las fiestas del pueblo, y en la Constitución no marca que no puedas traer grupos de rock con ideas marxistas, o comunistas, o falangistas si se terciase. No somos un estado "amarxista", no habiendo por tanto incoherencia. Va quien quiere ir, tanto al concierto, como a ver al Papa, como a ver las procesiones de Semana Santa, pero sigo viendo incoherencia (porque la hay) en los dos últimos eventos, así como la marca en la declaración que hace que tu dinero pueda ir a la Iglesia.

Dicho esto, remarco que a mí personalmente no me molesta que haya venido. Pero si nos ponemos, no sé cómo decirlo... éticos, le doy la razón a los anti-papa, porque el Estado debería ser coherente con la definición que se dio así misma en su momento. ¿Que no se lo cree nadie? Eso sería otro tema.

También criticaría las rebajas y ventajas que han tenido las JMJ ante otros colectivos, el dinero que ha dejado de ganar Madrid por decisión, según lo veo yo, desacertadas y que la Policía haya ido claramente a los 15M y no a por los mega-botelleos que han hecho los cristianitos, pero esto no creo que sea el objeto de debate, como tú bien dices en el post. Sólo dejo constancia de ello.

José Rafael dijo...

Constitución Española de 1978: "Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones." Art.16.3

En este caso no hay falta de coherencia si entendemos que sufragar parte de la visita del Papa es una forma de tener en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española (de parte de la sociedad en este caso) y que esto supone una relación de cooperación con la Iglesia católica.

Tomás dijo...

En efecto no hay incoherencia, como explica Pepe. Ante la visita de un personaje tan relevante a nivel mundial, líder de la Iglesia Católica, el estado colabora con ésta en preparar un suntuoso evento en una sociedad de larga tradición católica.

Que no obstante no es más que una de tantas ambigüedades e indeterminaciones que dan forma a ese esperpento de la transición, para contentar a todo el mundo.

De todas maneras no era ese el debate. Es decir, me da igual lo que diga la constitución, que no es la razón absoluta (ni mucho menos). La cosa iba de si es razonable y justo que que el estado pague y de que si es razonable y justo manifestarse para que el estado no monte o colabore con eventos de esa índole, con el consiguiente menoscabo de los mismos.

Besitos!

Raúl dijo...

No sé, "relación de cooperación" me parece un término demasiado ambiguo, como dice Tomás. Pero aún así, cooperar no es incentivar. Una cosa es no poner pegas, puesto que no estamos en un estado laico, y otra cerrar Madrid una semana y gastarse un pastizal. Por tanto, sigo viendo que el Estado, en su Constitución, se esfuerza en dar una imagen mucho más neutral del que luego se ve y por tanto, comprendo las quejas de algunos sectores (de ahí que crea que es una parte importante de este debate: si está legitimada o no esta visita). También comprendo que quizás no era el momento para traer a este hombre y gastarse (bastante) dinero público, igual que comprendo que en estas Fiestas de Mayo hubiera menos conciertos y eso (más allá de que no me gusten los grupos).

Así pues, resumiendo, que esto se está alargando más de que realmente me preocupa el tema:

-Moral o éticamente, no le veo problema a que venga el Papa.
-Legalmente, me ofrece dudas, pero no puedo negarlo categóricamente.
-Económicamente, en este momento actual de la historia de España, el Papa no debería haber venido.

PD: un punki defendiendo la visita del Papa con la Constitución en la mano... válgame el señor, vivir para ver XD

Yhandros dijo...

Pese a la ambigüedad, a mí me queda bastante claro que "una relación de cooperación" no incluye la inversión que se ha hecho y el grado de implicación que el gobierno y el ayto. de Madrid han mostrado en el evento. Y Tomás, yo lo veo justo al revés: Nos libaremos de la Iglesia metiendo su hocico en nuestra vida, cuando el estado deje de sobreprotegerla. Cuando desaparezca la casilla de dar el 0.7 de tu declaración de la Renta a la Iglesia, cuando dejen de cortar calles con esa facilidad para pasear figuritas de madera, o cuando, como es el caso, dejen de usar dinero público para ayudar a que un lider religioso (uno de una religión muy concreta) extienda su mensaje por la piel de toro.
Y no, no creo que lo hagan porque el pueblo lo pida. Han dejado bastante claro, unos y otros, que se la suda bastante lo que quiera el pueblo. La Iglesia Católica, secta mayoritaria, es otro poder económico más al que el estado español está supeditado, y nuestros políticos bailan también a su son.

Tomás dijo...

Sí, sí... Oye Raúl, ahora que caigo, ¿a ti te interesaría volver a desperdiciar tiempo y dinero con un grupo? Lo digo porque Abismo en teoría ha fichado bajista, pero nos está haciendo un poco la culebra y si no se digna a aparecer la semana que viene no será menester de que vuelva. ¿Tú que dices? ¿Estás toqueteativo?

Raúl dijo...

¿Pero tenéis cantante y todo ya? Os creía más apalancados, como te dije en mi blog. No sé, ahora mismo no tengo mucho gusanillo de música, ensayo y local, la verdad, pero bueno, a ver si nos vemos en persona y me comentas el proyecto... esto es, cuánto pagáis de local, cuánto ensayáis y cosas de ésas, por si me animase. Y siempre y cuando echéis al otro bajista, que parecéis Ross con los divorcios, pijo.

PD: estoy de acuerdo en su mayoría con Yhan, por cierto.

Tomás dijo...

Oquei, ya te comento si te veo, pero sí que estamos bastante activos últimamente.

Por lo del debate yo no añadiría nada más. Osea, yo opino que primero debemos de cambiar nosotros como individuos para que cambien ciertas cosas, así como las consecuencias de dichas "cosas", y Yhan opina que el estado debe cambiar aspectos de la sociedad para que ésta cambie su manera de concebir ciertos estamentos sociales. Osea, más o menos lo contrario.

Así que creo que tanto vuestra postura como la mía han quedado ya más o menos claras y entendibles, reduciéndose todo ya a una mera cuestión de criterio u opinión (o interpretación). Por ejemplo tú, Raúl, hablas de lo económico como factor determinante en tu oposición, y yo en cambio no considero que la cantidad sea desorbitada (hablando siempre de capital público, claro) en comparación con otras actividades sectoriales en las que se invirte dinero público también. Como digo, cuestión de criterios.

Yo zanjaría ya el asunto, que me he cansao. Salvo que queráis añadir alguna postdata, claro. Además que mientras discutimos el Papa ya ha venido y se ha pirado otra vez :D

Besitos

The crow dijo...

Solo un par de apuntes.

No he leído todos los comentarios, por lo que si se ha dicho algo al respecto perdónenme.

1) Raúl, la manifestación contra la visita del Papa no era parte del movimiento 15M, parece que ahora en España, se manifieste quien se manifieste, es cosa del 15M, y no es así.

2) Tomás, el caso hipotético que dices de una banda de rock ya pasa, los mismos que han pagado la visita del papa son los que censuran a SA.

Raúl dijo...

No, yo sólo le atribuyo al 15M lo que ellos mismo se atribuyen. La manifestación anti-Papa sí era parte del 15M de Madrid, reconocido por ellos mismos. Y no me parece bien.

PD: ¿a SA no los censuran por algo con el terrorismo etarra o algo así? no lo sé muy bien, pero me suena algo de eso...

The crow dijo...

Llegaron a denunciarlos por apología del terrorismo, pero el juez Garzón le dio la razón a SA

Mario dijo...

Lo que tenga que ver con la cooperacion me interesa mucho y por eso soy de interesarme en las cosas que pueda para llevar adelante distintos proyectos. Ojala que mejore en las cosas que emprenda y para eso voy a ver con Lan Argentina las cosas que se hacen en otros lugares