Os he vuelto a mentir

Sé que prometí una crónica de mi viaje, así como sé que me la habéis pedido abajo. Sé, además, que sabéis que lo sé. No voy a escribirla. Y no voy a hacerlo, no porque no haya anécdotas que contar, que las hay, todas ellas tan divertidas como carentes de sentido para el que no las ha vivido. No es que no me lo pasara bien, fue un viaje fantabuloso (como le leí una vez a Tappy), y de hecho podría escribiros centenares de líneas narrando pormenorizadamente todo el viaje, pero aparte de lo aperreoso que puede resultar para vosotros el que os haga leer tanto, está el hecho de que ni aun así os haríais una idea remota de lo que ha sido el viaje. Y no lo digo por las anécdotas vacías y superficiales, que tienen su gracia y que os las contaré en vivo y en directo, no, me refiero a lo que ha supuesto mentalmente para mí. El “intraviaje”, por ponerle un nombre. No hablo tampoco de la manera de pensar respecto a asuntos globales y concretos de índole ideológica y de dominio público, que también, sino a un cambio en la forma de afrontar mis propios problemas, y de arrojar luz sobre otros ya existentes. Todo ello mental. Digamos que hay personas y/o cosas que antes me importaban más que ahora, y viceversa. Tampoco me refiero a que haya estrechado lazos con mis compañeros de viaje, cosa evidente por otro lado, pero que resultará tan efímera como el propio tiempo quiera. Ha virado mi punto de vista… y no sé como explicarlo mejor. De alguna manera me ha enriquecido y me ha cambiado; mi primera impresión al llegar aquí ha sido de asco hacia lo que me esperaba, todo en general, que trato de disimular como puedo.

Supongo que también va por rachas, pero ahora mismo he comprendido que no hay mucho que me retenga aquí, y cada vez tengo más claro que volveré. No sé cuando, pero volveré.

Besitos!

Ahí os quedáis, panolis, que yo me las piro…

…Al norte! Como ya sabéis la mayoría, este martes que viene me voy una semanaza de vacaciones a las vascongadas. Nos subimos parte de los olímpicos (Marquitos, Vicen y un servidor), y el Chaves como última incorporación estelar.

…Nos vamos a poner como ciclistas.

El plan es salir el martes tempranico pa’ llegar de noche a Mutiloa, una aldeucha preciosa en el mismo centro de las verdes tierras euskaldunes, donde nos alojaremos tres días en los que intentaremos ver Pamplona, San Sebastián… o lo que se tercie. Adjunto foto del lugar y de la simpática pensioncilla en la que nos alojaremos. ¿Mola eeehhh?

Luego el viernes tiraremos pa’ Bilbao a plantar los culos en el festival Kobetasonik, cuyo cartel os adjunto también, y en el que como podéis observar, tocan los más grandes: JUDAS PRIEST. Será la segunda vez que los vea, y además allí nos juntaremos con el resto de peña alcantarilleja que subirá también. Y ya el domingo tiraremos pa’ Zaragoza a poner la gorra en casa de un colega (más del Marcos que nuestro) que vive allí, hasta el martes siguiente (si seguimos con vida). Y ya pa’bajo, que ya está bien.

Intentaré pasármelo que te cagas, comer pinchos, pillar productos típicos de allí (sí, de lo que estáis pensando también), y conocer peña. Si voy bien de cuartos intentaré traeros algún recuerducho. Por eso deciros que como la semana que viene no estaré, pues que se queda el Yhan al mando, para que no escribáis muchas gilipolleces (ya sé que todavía queda tiempo, pero así me ahorro de actualizar, J) …Por cierto, el alojamiento ha sido cortesía del Imanol ¡Gracias nenx!

Para finalizar, y no dejaros así cual tallo de geranio de verde por la envidia cochina que os debe de estar corroyendo ahora mismo, os pongo el enlace de un vídeo que me ha hecho gracia. De esos que luego no ve nadie.

Para meteros un poco en harina os lo presento. Se trata de un humorista que no sé si conocéis que se llama Juan Carlos Ortega. Lo conocí cuando estuve trabajando por las tardes en Bernal y Gallego, en el microespacio que tenía en La Ventana, programa maravillosamente conducido por Gemma Nierga, en la cadena SER. Aparte ha trabajado en otras emisoras, en el programa de crónicas marcianas, y ahora por lo visto en Channel 4, programa del que saco este vídeo. Todas las voces de peña que llama por teléfono las hace él, y suelen ser de gente muy de “andar por casa”, con un humor que a mí me gusta cantidubi. A algunos ya os he puesto alguna cuña suya (¿Te acuerdas Yhan de aquella del menda que preguntaba que por qué 10 segundos? Jeje).

El enlace pa’ verlo es ESTE.

Con esto y un bizcocho os dejo hasta sólo Dios sabe cuando, que tengo que empollar mucho antes de largarme. …Bueno si eso comentad y ya os contesto ahí. Prometo crónica a la vuelta.

Sed felices!

Lo que os diga...

Fractura de la parte superior del radio con desplazamiento. Eso es lo que tengo en el codo según el traumatólogo, quién alegremente me dijo que si me hubiera encalomao nada más hacerme la pupa, me habría metido al quirófano y me habría puesto un tornillito. Ahora estaría feliz como una lombriz y haría con el brazo divertidos movimientos. Pero no, ya sin escayola sigo sin poder moverlo casi y me espera una larga recuperación, magnetoterapia mediante, aparte de que no se va a quedar “en el sitio” que debería. Una movie.

Teóricamente empiezo con la mierda esa de los imanes el martes, o mejor dicho “emepezaba”, porque aquel cuyo padre es lucifer (y a la vez padre de su madre también) me va a hacer volver a presentarme en su despacho el martes a la misma hora, porque esta mañana cuando he llegao estaba demasiado cansado para hacerme la jodida entrevista de la que depende mi aprobado.

Se tiende a decir que no hay ninguna persona tan buena que no tenga nada malo ni tampoco una persona tan mala que no tenga nada bueno. Bueno pues no es verdad, hay una.

2 horazas de esta mañana para nada. A tomar por culo. Además se me ha olvidado el emepetrés y el bus ha sido tedioso como nunca. Y luego está el calor, que saca lo peor de la especie humana. De hecho lo saca más en el autobús. Cosas que tiene el calor.

He llegado lleno de odio a mi casa. Odio en general hacia el mundo. Me hubiera gustado decirle a esa gente que te dice que el mundo es un lugar maravilloso: ¿Pero has estado en algún otro lugar que no sea el mundo para comparar? Tonto del culo.

Hay ciertas culturas (hindúes u otros... o yo que sé) que tienen la teoría de que Dios creó varios mundos antes que éste, pero que no les molaron mucho, y al final dejó este. Menudo chapuzas. A veces me lo imagino diciendo: Bueno, éste no me ha quedado tan mal como los otros doce. Voy a ir metiendo a la gente ahí y que se vayan apañando con lo que hay, que ya son las once y media.

Lo que os diga... menuda mierda. a ver si me pongo ya con el mogollón de cosas que tengo que hacer para la uni (¡parece no acabarse nunca!), que no puedo con tanto agobio. Por cierto, si alguien conoce una manera rápida y breve de obtener pasta que me lo diga; las deudas me comen.

Agobio, agobio, agobio...