lunes, 4 de mayo de 2009

La máquina del tiempo

Esta sería una buena ocasión para poner algún tipo de documento gráfico sobre el concierto de la semana pasada, o sobre este finde pasado, en el que, frustradas mis espectativas laborales, anduve piojo por las fiestas de caravaca. Dichos documentos existir existen, lo único que pasa es que no en mi poder, y cuando me lleguen ya veré que hago con ellos. Es por ello que, pese a que sabéis de sobra que mi prosa es lo suficientemente gráfica y elocuente para que no quedara sosa una minuciosa crónica de mis andanzas, voy a dejarlo para más adelante. Las cosas o se hacen bien o no se hacen.

La semana pasada estuve con el ordenador medio roto (y sin sonido sigue), se me rompió la cuarta cuerda de mi española, y no había ni euros para chisparme, ni curro, ni nada en que ocupar mi tiempo. Ante tales perspectivas de aburrimiento pasé mis tristes horas enredado entre tareas domésticas y mis viejos tebeos de Son Goku.

Ayer, aprovechando que comí en casa de mi madre, desenpolvé mi vieja super nintendo y me la traje. Esta mañana cuando he entrado a mi habitación y he visto tirados los comics de goku y la super enchufada a la tele, me he dicho: "Tomi, lees manga, juegas a super mario, y hay 4 millones de parados... estamos en 1995".

Besitos!

PD: Si alguien conserva juegos de la super que me los preste... O si alguien quiere darme trabajo ya sabe... O si alguien tiene una cuarta cuerda a mano... Señor, qué vida más arrastrada.

PD2: Este viernes vienen los Obús... Mmmm.